Maestría técnica
 
          La marca Harley-Davidson debe su éxito a las personas que trabajan en ella. En este artículo, Mark Weston nos enseña qué hace falta para convertirse en técnico H-D con todas las certificaciones
Texto: Jeremy Pick
Fotos: Jonathan Fleetwood
Los técnicos de Harley-Davidson® tienen la tarea de mantener las motos de los clientes en óptimas condiciones. Los cursos de formación avanzada, diseñados y desarrollados por la Motor Company, proporcionan a los técnicos las destrezas y conocimientos necesarios para identificar y solucionar cualquier problema eficazmente y de la forma más rápida posible.
Mark Weston, director de formación técnica regional encargado de la región Oeste Internacional, es responsable de que la formación ofrecida a los técnicos de Harley-Davidson siga siendo una de las mejores del sector. “El objetivo es que los técnicos cuenten con las destrezas necesarias para diagnosticar y solucionar los problemas a la primera”, nos dice Mark. “Nuestros clientes conceden un enorme valor a sus motos, y cuanto mayor sea el nivel de competencia y formación de nuestros técnicos, más rápido podrán volver a usarlas”.

Subir de nivel 
La formación es un proceso riguroso y exigente, con un nivel de cualificación para cada estadio. Durante la formación, los técnicos de Harley-Davidson van pasando de un nivel al siguiente y aprenden desde cómo realizar ajustes básicos hasta a desmontar y volver a montar el motor y la electrónica de una moto en sesiones de tipo seminario.
Incluso los técnicos de gran experiencia tienen que comenzar desde el nivel de reconocimiento "Staff". Desde aquí pasan a "Technician" y posteriormente a "Advanced Technician" y "Expert Technician", hasta alcanzar la cumbre de la capacidad técnica: "Master Technician". Conseguir la certificación de Master Technician lleva al menos tres años, con cursos coordinados mediante distintas metodologías y rigurosos sistemas de evaluación que garantizan la adecuada transferencia de las destrezas.
Operación global 
Los cursos para Europa, Oriente Medio y África se realizan en uno de los seis centros de formación en España, Bélgica, Francia, Italia, Países Bajos, y Sudáfrica. En cada centro, los cursos presenciales dirigidos por un formador se celebran durante la temporada baja, desde comienzos de octubre hasta mediados de marzo (salvo en Sudáfrica, donde la temporada de uso de la moto es menos estacional que en Europa). Pero esto no es todo: los técnicos siguen trabajando en cursos de formación online durante todo el año, y reciben información continuada sobre nuevas tecnologías. Los formadores reciben cursos específicos de alto nivel en la H-D University, en Juneau Avenue (Milwaukee). 

Información privilegiada 
“Los técnicos han de conocer en profundidad los sistemas y recibir formación para diagnosticar y corregir cualquier problema con el máximo nivel de destreza y precisión”, dice Mark. “El proceso de formación no se limita a aprender a reconocer fallos y corregirlos, sino a utilizar el proceso lógico adecuado para acotar el problema mediante técnicas de aislamiento, identificar la causa y buscar la forma más eficaz de remediarlo. Esto se traduce en que la moto se repara de la forma más rápida y eficiente y con el mínimo coste posible, de modo que nuestros clientes tengan la seguridad de saber que su moto está en manos de personal técnico con la mejor formación, herramientas y sistemas de diagnóstico”. 
En Harley-Davidson la innovación es constante, y los técnicos no pueden quedarse atrás. Las escuelas técnicas Harley-Davidson se han creado para ofrecer formación sobre nuevos equipos y tecnologías antes de que lleguen al cliente. Algunos ejemplos recientes son la más reciente plataforma de información y ocio para las Touring, el BOOM!™ Box GTS y el nuevo Sistema de Control de Tracción (TCS) de las Harley-Davidson® Trike. Los técnicos aprenden a utilizar los más recientes equipos de diagnóstico desarrollados específicamente para motos Harley-Davidson, así como las herramientas especiales, información técnica y boletines de servicio disponibles: ventajas fuera del alcance de quienes operan en el mercado de postventa.
Preparados para el futuro 
Estas ventajas prácticas resultan aún más cruciales cuando se presentan nuevas tecnologías radicales y muy disruptivas. A medida que aumenta la complejidad de las motos, con constantes avances en electrónica, sistemas de navegación mediante satélite y equipos de motor mejorados, la precisión en el diagnóstico y reparación de problemas se hace aún más importante. El ejemplo más extremo es la tecnología de vehículos eléctricos (EV), con el lanzamiento de una nueva motocicleta radicalmente diferente, la Livewire™ en agosto de este año. 

“La tecnología EV es totalmente diferente de todo cuanto Harley-Davidson ha hecho con anterioridad, y cada concesionario recibirá formación sobre inspección, reparación y mejoras de las nuevas motos antes de que lleguen a ponerse a la venta”, nos dice Mark. “Los técnicos de los concesionarios conocerán perfectamente las diferencias de esta nueva tecnología, igual que conocen los motores y sistemas tradicionales refrigerados por aire.
“Los técnicos de Harley-Davidson están reconocidos como los mejor formados y cualificados del sector. Seguimos avanzando en este nivel de formación para que los clientes puedan tener confianza absoluta en la preparación y destreza de los técnicos autorizados Harley® para ofrecer el legendario nivel de atención que esperan nuestros usuarios. Esto significa que nuestros clientes pueden tener absoluta confianza en que la moto de la que tanto se enorgullecen está en las mejores manos: las de unos técnicos formados en las fábricas de nuestra compañía y altamente cualificados”.

Más información sobre Mark 
Como director de formación técnica para la región Oeste Internacional, el cometido de Mark es garantizar la planificación y ejecución adecuadas de los cursos de formación para técnicos, y que los alumnos dispongan de los equipos y destrezas necesarios para ofrecer sus capacidades al máximo nivel posible. 
Con anterioridad, Mark había trabajado como técnico en el Ejército del Aire británico, desde donde pasó al mundo de la competición automovilística, culminando en la Fórmula Uno. Pasó por distintos puestos en formación técnica y dirección en Audi, Seat y Volkswagen antes de ocupar su actual cargo
en Harley-Davidson®. 
“Este puesto me permite trabajar en mi auténtica pasión, que es la formación de personas; con Harley-Davidson vi la oportunidad de hacerlo en una marca que siempre he adorado. Me encanta todo lo relacionado con la técnica y paso muchas tardes con la caja de herramientas, ayudando a amigos en el circuito de carreras o en el garaje. He tenido la fortuna de encontrar trabajo en una empresa que me encanta y haciendo lo que más me gusta.
¿Su moto favorita? “En estos momentos elegiría la Breakout®: me encanta el estilo chopper clásico y me parece que la posición de conducción es perfecta. También me gusta la Forty-Eight® por su falta de añadidos y estilo clásico, y con unos buenos silenciadores tiene un sonido épico; pero la moto de mis sueños es la Road Glide® CVO. Me encanta su apariencia y su sorprendente maniobrabilidad para una moto tan grande. Y, por si fuera poco, el Milwaukee Eight 117 es un motor realmente salvaje que hace que la moto vuele sobre el asfalto”.

 
           
          